https://www.youtube.com/watch?v=TTtsHKKb-CI
First lesson of the day is, or fruit time. Orangutans naturally spend up to six hours a day. So breakfast doubles as a perfect learning opportunity. This morning's lesson is in coconut creaking. Orangutans learn from example, so this caregiver shows the how it's done. Mumut, a little male catches on immediately, while Valentino has a more interpretive approach. Whit his distinctive pale belly stripe, Valentino is the class clown of Forest School Group One. What he lacks in technique he makes up for in exuberance. When the puzzle proves too hard to crack, Valentino does exactly what he would go if he was in the wild—asks mom for help. Valentino was found alone in a forest as a baby after ask mom was killed. Babysitter is currently his foster mother, and she knows Valentino must learn to do this on his own if he is to ever graduate from jungle school. The students of Forest Group Two are incrementally more skillful. It's not so much age that divides groups one and two, but ability. Little Merly has learned how to husk her coconut so she but not for long. Opportunistic Valentino moves in to share. He may not be the best at coconut cracking but learning how to reap the rewards of the others hard work could be an excellent survival skill. Three-year-old Beni has a more laid back approach. He's exercising his jaws as his powerful teeth scrape the coconut Shell. But there's not a lot of other energy being exerted. He doesn't even flinch as Merly helps herself to his leftovers. Little does Benny know that his expanding girth hasn't gone unnoticed, and he's about to be put on a diet.
La primera lección del día es la hora de las frutas. Los orangutanes pasan naturalmente hasta seis horas al día. Por lo tanto, el desayuno también es una oportunidad de aprendizaje perfecta. La lección de esta mañana es sobre el crujido de coco. Los orangutanes aprenden del ejemplo, por lo que este cuidador muestra cómo se hace. Mumut, un pequeño macho se da cuenta de inmediato, mientras que Valentino tiene un enfoque más interpretativo. Con su distintiva franja de vientre pálido, Valentino es el payaso de clase del Grupo Uno de Forest School. Lo que le falta de técnica lo compensa con exuberancia. Cuando el rompecabezas resulta demasiado difícil de resolver, Valentino hace exactamente lo que haría si estuviera en la naturaleza: le pide ayuda a mamá. Valentino fue encontrado solo en un bosque cuando era un bebé después de preguntarle a mamá fue asesinada. Babysitter es actualmente su madre adoptiva, y sabe que Valentino debe aprender a hacer esto por sí mismo si quiere graduarse de la escuela de la jungla. Los estudiantes del Grupo Forestal Dos son cada vez más hábiles. No es tanto la edad lo que divide a los grupos uno y dos, sino la capacidad. La pequeña Merly ha aprendido a descascarillar su coco, pero no por mucho tiempo. Valentino oportunista se muda para compartir. Puede que no sea el mejor en romper cocos, pero aprender a cosechar las recompensas del trabajo duro de los demás podría ser una excelente habilidad de supervivencia. Beni, de tres años, tiene un enfoque más relajado. Está ejercitando sus mandíbulas mientras sus poderosos dientes raspan la cáscara del coco. Pero no se está ejerciendo mucha otra energía. Ni siquiera se inmuta cuando Merly se sirve sus sobras. Poco sabe Benny que su circunferencia en expansión no ha pasado desapercibida y está a punto de ponerlo a dieta.
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